Estreno en el blog un especial
dedicado a la trayectoria de Quentin Tarantino. Esporádicamente iré haciendo
una serie de especiales, bien tratando sagas, directores, o un conjunto de
películas del mismo tema.
En este especial pretendo plasmar
la trayectoria de Tarantino en el cine y como han influido sus películas en la
historia cinematográfica.
Quentin Tarantino se ha
convertido en todo un referente en el cine mundial. ¿A quién no le han
preguntado alguna vez quienes son los directores preferidos y más grandes del
cine?, ¿y quién no ha pensado en Tarantino ante esta pregunta? Sin duda alguna
es uno de los grandes en Hollywood y ojalá no deje de dirigir y escribir
películas, al igual que el maestro Spielberg y el genio Scorsese.
Empezó su reconocimiento mundial
con Reservoir Dogs, una película
donde el guion es el gran soporte de la historia, que además es original. La
dirección llevada en esta película es magistral, y consiguió dar un portazo gracias
a esta película en el Hollywood de entonces. De esta película se recuerdan
muchas escenas como escenas para aprender a grabar buen cine, mantener los
tempos, mezclar la música sin que destroce la historia. Todo esto lo realiza de
una manera muy elegante Tarantino.
¿Cómo no recordar la famosa
escena con la mención a “Like a Virgin” de Madonna? ¿O con la propina del bar?
Y estas dos ocurren en las dos primeras escenas de la película, no hay que
esperar más. Al visualizar estas escenas ya estás domado por Tarantino y debes
seguir viéndola, no puedes apartarte de la pantalla.
El argumento de la película no
parece complicado; un grupo de ladrones idean un plan para robar unos
diamantes. Durante el robo descubren que hay un traidor que colabora con la policía
y tratan de averiguar cuál es.
Tras las dos escenas iniciales
del bar, Tarantino mete los créditos presentando a los personajes. Uno de los
openings más imitados del cine (junto a los famosos de James Bond), con una
música eternamente reconocida.
Y tras estos créditos empieza una
sucesión de escenas, flashbacks, botes atemporales, etc… Unas de las cosas que
más miedo dan al emprender una película y que Tarantino lleva como sello de
identidad, los famosos flashbacks.
Muchísimas escenas se recuerdan
de esta película, sin embargo la escena de la tortura llevada a cabo por Mr.
Blonde (Señor Rubio) muestra un temple y una paciencia de grabación pocas veces
vista, mimando cada segundo de la escena y cuidando la fotografía en todo
momento. Y la mezcla con la música la convierte en la mejor escena de la
película. No he vuelto a ver mejor actuación de Michael Madsen en todo lo que
he visto de él.
Es admirable la mano que tiene el
director estadounidense. Su manera de contar las películas es espectacular,
mareando al espectador en todo momento y haciéndote pensar en todos los
segundos del filme donde estás y qué escena es la que ha ocurrido antes y
después. Aun así, al haber acabado la película no puedes evitar reflexionar
unas horas para intentar hilar en tu mente el orden temporal, y no consiguiendo
atar todos los cabos hasta que realizas un segundo, tercer, cuarto o enésimo
visionado de la cinta.
Ya empezaba a verse que un mago
del cine emergía en el cine mundial, que entraba para quedarse y convertirse en
un referente mundial en no mucho tiempo.
Y dos años después llegó su
película más reconocida y considerada una de las diez mejores películas de la
historia según la revista Empire, Pulp
Fiction.
Con esta película directamente
entra en el altar del cine. Se consagra y deja su listón a un nivel
prácticamente insuperable, y no superado por ninguna otra de sus películas. Con
Pulp Fiction consigue crear unos cánones del cine que gran cantidad de personas
intentarían imitar y fracasarían estrepitosamente, pocos se pueden asemejar al
magistral Tarantino y a su mágica batuta con la que dirige su cine.
Nos vemos en la segunda parte!